Es verano y las temperaturas cálidas y los días más largos sacan a relucir el ciclista que todos llevamos dentro, desde el principiante hasta el ciclista de competición. Inserra Kelley Sewell lamenta informar la noticia de la muerte de un ciclista de competición en el estado vecino de Nebraska, Iowa, en la carretera estadounidense 218 cerca de Washburn, Iowa, en la madrugada del 2 de julio de 2018. Connie Inks, 54, de Waterloo, Iowa murió en un accidente en el que se vio implicado un vehículo conducido por otro residente de Waterloo. Al parecer, la Sra. Inks era una ávida y veterana ciclista, remadora y triatleta, así como una frecuente ganadora de medallas en estos deportes. Con tal experiencia y dominio de los deportes, se podría suponer que estaba bien familiarizada y tenía experiencia con el ciclismo de carretera. Todavía se están investigando los detalles de este trágico y triste suceso, e Inserra Kelley Sewell ofrece sus más sinceras condolencias a la familia y amigos de la Sra. Inks.
Un suceso tan trágico nos recuerda la necesidad de cuidarnos unos a otros en nuestros días de correr de un lugar a otro en jornadas atestadas. En la sociedad moderna, nuestras carreteras y autopistas las comparten desde ciclistas hasta camioneros, pasando por todo tipo de vehículos. A menudo nos dirigimos al trabajo o a otros destinos importantes, y la cultura en la que vivimos se presta a que los conductores se distraigan y dejen de prestar atención a la carretera y a los demás. Esta tragedia es un desafortunado recordatorio de que hay que reducir la velocidad al límite permitido, estar siempre alerta y no distraerse, y conducir pensando en la seguridad en todo momento en la carretera.